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SAN SEBASTIÁN OBTIENE BUENOS RESULTADOS EN ENERGÍA, CALIDAD AMBIENTAL, RECICLAJE DE RESIDUOS Y MOVILIDAD SOSTENIBLE
El Observatorio de la Sostenibilidad y Clima de la Fundación Cristina Enea ha publicado el Informe Anual de Sostenibilidad y Clima de San Sebastián con los datos relativos a 2019. Se trata de una radiografía de la ciudad con más de 50 indicadores y datos relevantes para conocer la situación de la ciudad, contemplando su evolución en los últimos años. Además, el informe se articula, por primera vez, desde la óptica de la adaptación y medidas de la ciudad al cambio climático, como el plan DSS Klima 2050.
La Concejala de Ecología, la socialista Marisol Garmendia, ha destacado los buenos parámetros que sigue registrando San Sebastián “aunque en algunos aspectos tenemos que mejorar” y ha subrayado “los datos que contiene el Informe van a experimentar una variación drástica. Son datos de 2019 y en este año 2020 el confinamiento va a suponer todo un revulsivo en muchos parámetros. Un antes y un después ante la ausencia de actividad en nuestras calles durante tres meses y una lenta y cautelosa vuelta a la llamada nueva normalidad que tendrá su reflejo en el consumo, en los residuos, en la movilidad.. Tengámoslo en cuenta a la hora de recoger los datos del Informe del pasado año”, ha subrayado.
Por su parte, Manu González, director técnico del Observatorio de la Sostenibilidad y Clima de Fundación Cristina Enea, y coordinador del Informe, ha manifestado que se trata de un informe nuevo, ya que incorpora nuevas miradas, datos y fuentes de información. "Este estudio se articula y plantea desde los ámbitos de actuación establecidos en el Plan de Lucha Contra el Cambio Climático de la ciudad DSS Klima 2050. La hoja de ruta para la reducción de las emisiones carbónicas y adaptación climática de San Sebastián". Según el responsable del Observatorio de la Sostenibilidad, el estudio hoy publicado "sienta las bases para analizar con rigor y detalle las transformaciones de la ciudad en su gestión del reto climático".
>>> INDICADORES DESTACADOS
ENERGÍA
En lo que respecta al consumo y producción de energía, el consumo eléctrico ha descendido ligeramente (0,42%). Registra un consumo medio anual 3.702 kWh por habitante; el consumo de gas desciende (4,79%) tras cuatro años consecutivos de incremento, suponiendo 3.933 kWh por habitante al año. Por otro lado, la generación de energía procedente de fuentes renovables, tras el notable incremento de la capacidad instalada de biomasa en 2018 debido a la instalación del District Heating de Txomin, en 2019 aumenta ligeramente el número de nuevas instalaciones de geotermia, solar térmica y solar fotovoltaica. La producción energética de fuentes renovables sigue un pausado incremento. Se ha estimado una producción global de energía renovable en la ciudad de 11.103.521 kWh, que viene a representar un incremento del 19,54 % respecto a 2018.
Hasta 2019 han obtenido la certificación energética 49.520 inmuebles; de ellos, solamente el 5,90 % obtiene la calificación A, B o C (las categorías más eficientes), representando el 13 % de la superficie total certificada.
RESIDUOS
Se incrementa la cantidad global de residuos un 0,39 % más que en 2018, lo que supone que cada habitante genera 488 kilos de basura al año. Se incrementa la tasa de recogida selectiva de residuos, alcanzando el 41,47% de los residuos generados y supone que cada habitante generas 202 kilos de residuos para reciclar, cifra superior a años precedentes, que entre los años 2015 y 2018 se situaban por debajo de los 194 kilos por habitante/año. Descienden, por tercer año consecutivo, en un 2,08 % los residuos llevados a vertedero, lo que significa una media de 286 kg/habitante.
Respecto a la materia orgánica, un total de 28.132 familias y 1.812 establecimientos de diverso tipo participan en el sistema de la recogida de residuos orgánicos mediante contenedores específicos. La materia orgánica recogida ha alcanzado los 5.456.155 kg; se ha recogido más residuo orgánico a través de los contenedores de la vía pública que utilizan las familias, un 6 % más que en 2018, así como de los grandes productores. Además, 837 hogares disponen de compostador individual y 94 familias participan en el programa de compostaje comunitario habilitado en 9 barrios de la ciudad.
CALIDAD DEL AIRE
La calidad del aire urbano es analizada a través de las estaciones de medición situadas en el término municipal. Los días de calidad del aire “muy buena” o “buena” han alcanzado el 99 % en la estación de Puio, el 95 % en la estación de Avenida de Tolosa y el 87 % de todos los días del año tanto en la estación de Ategorrieta como en la de Easo.
CALIDAD DEL AGUA
La calidad del agua con la que se abastece la ciudad sigue siendo óptima, con un 98,91% de analíticas satisfactorias. Por otro lado, los análisis de la calidad del agua del Urumea permiten observar una creciente mejoría de los objetivos medioambientales en las zonas más cercanas a la desembocadura (el estado global presenta una clasificación Buena en Santa Catalina) y en la costa (el estado global presenta una clasificación Buena en Mompás); no obstante, las analíticas realizadas en la zona media del río, entre los puentes de Loiola y Santa Catalina, muestran que persisten descensos en los índices de la calidad de esta agua (el estado global presenta una clasificación de Peor que bueno en Loiola).
MOVILIDAD
En el ámbito de la movilidad, los desplazamientos a pie siguen siendo los más utilizados por la ciudadanía, representando un 46,2% del total. “Si a ello le unimos el 4,2% de los desplazamientos que se realizan en bicicleta, sumamos un 50,7% de movimientos no motorizados. La bicicleta registra 21.702 desplazamientos diarios, habiendo crecido en 2% respecto de 2018”, ha señalado Garmendia. “Los traslados en vehículo motorizado individual, bien en coche particular o en moto, suponen el 31.3% del total, con un ligero incremento”.
El transporte público sigue siendo un medio muy utilizado por los donostiarras en sus desplazamientos diarios. A través de los diversos sistemas, (Dbus, Lurraldebus, Euskotren o Renfe) se han contabilizado 33.608.098 viajes efectuados en el interior de la ciudad. “Esta cifra supone una media de 179 viajes por habitante al año, cifra que está entre una de las más altas de Europa y muy por encima del resto de ciudades españolas de parecido tamaño”, ha destacado la concejala de Ecología.
El índice de motorización ha descendido muy ligeramente tras tres años consecutivos de aumento; representa una proporción de 405 turismos y 141 ciclomotores por cada 1.000 habitantes. El 71,8% de los vehículos matriculados en la ciudad recibe algún distintivo ambiental, aunque solamente un 1,3% entra en la categoría de vehículos de mayor eficiencia energética atendiendo a su impacto ambiental.
RUIDO
Las diferentes medidas adoptadas en diversos ámbitos, están permitiendo disminuir el número de personas expuestas a niveles altos de contaminación acústica. El último Mapa Estratégico de Ruido (2017) dice que la población expuesta a niveles de ruido superiores a los recomendados por la OMS, ha descendido al 11% frente al 30% de 2011. El Plan municipal de mejora del Medio Ambiente Sonoro contempla las medidas para reducir en los próximos 5 años por debajo del 5% la población expuesta a niveles superiores a los recomendados por la OMS.
EMISIONES
En 2018 las emisiones de efecto invernadero en el municipio han vuelto a incrementarse, un 1,48 % respecto al año anterior, no habiendo conseguido frenar esta tendencia ya observada desde 2016. Los ámbitos en los que se produjo el incremento fueron los de la industria y el consumo energético de los hogares. Sin embargo, la movilidad continúa siendo la principal responsable de las emisiones que se contabilizan de la ciudad, suponen el 41 % del total de las emisiones inventariadas, siendo el vehículo privado el principal foco emisor.
DOCUMENTACIÓN
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